Podría decir que antes de ti no había nada
que la vida sin ti es una burla
que tus besos son mi droga
que llegaste a salvarme, que me completas
que cuando te vas el sol no sale.
Que era como un perro abandonado,
que eres el espejo en donde veo mi reflejo
que vivo por ti y por ti muero
que nunca te dejaré ir
que somos mucho más que uno
que eres todas las razones y una más
que los segundos se alargan si te pierdo
que envidio el viento que acaricia tus cabellos...
Y nada de eso sería mentira en el idioma de los que se aman. Y puede que hasta me creyeras. Y puede que fuera cierto. Y puede que hasta muriera si te fueras.
Pero es que en mi pasado sí hubo historias
y la vida antes de ti fue intensa
que mi droga es estar aquí y ahora
que no quiero salvarme, que yo era un hecho
que el sol sigue saliendo
Que no soy el perro de nadie
que no me gustan los espejos
que si mueres tendré que seguir
que si te quieres ir te diré hasta luego
que tu y yo somos cosas diferentes
que hay otras razones que no son malas
que si no estás me invento paralelos
que tu cabello al viento no me importa
Y aunque todo esto es cierto y me creyeras y aceptaras y tomaras lo que queda, y los pasillos de nuestro laberinto no llevaran a ninguna parte, te juro que antes de ti no había nada...
jueves, 28 de agosto de 2008
lunes, 18 de agosto de 2008
Irving Saladino: A 8.34 metros de la gloria
En ciudad de Panamá la mañana empieza a despejarse, y una luna casi llena no se deja vencer por el sol del 18 de agosto de 2008. Me visto rápidamente. Comienza la semana. No hay muchos autos en la carretera. Pero no es un día como todos. La gente llegará algo tarde a sus trabajos, porque ¡hoy salta Saladino!
Las distancias. El divertido color de tus zapatos. Tu lenguaje en clave a través de las cámaras de televisión. La presión. Las faltas en la línea de salida. Nervios y oraciones. Las lágrimas de tu gente. El esfuerzo de una vida consagrada. Pasos medidos, estrategia, casi volar sobre la arena. Un pueblo necesitado del sabor de la victoria. 8.34 metros. La receta perfecta para la inmortalidad: la distancia en la que te has hecho leyenda y que hoy nos hace más orgullosos aún de haber nacido bajo este cielo.
Quizás nunca pensé vivir para ver un momento así. Son acaso segundos de emoción. Ahora sé que pronto, al otro lado del mundo el himno de mi patria pequeñita se escuchará y la bandera se elevará lentamente para que, luego de esos 8.34 metros, el nombre de Panamá reine sobre las naciones de la tierra.
Irving. Eres mil veces ganador porque no sólo has luchado contra tus contendores, sino también contra un sistema corrupto, federaciones deportivas formadas por hombres sin alma, de esos que aseguran primero su boleto a las Olimpiadas y después de que nuestros muchachos tengan uniformes, entrenamiento, canchas, equipo y credenciales. De esos que revenden boletos de cortesía. De esos que se ríen del pueblo todos los días. A pesar de todo esto, hoy has encendido la llama olímpica en el corazón de cada panameño. Y no nos alcanzan las palabras para darte las gracias. Porque necesitábamos lo que nos has regalado. Porque mereces la gloria que has alcanzado y demostrado que de cosas buenas también se hacen titulares.
Ningún panameño olvidará dónde estaba cuando cubriste a tu patria de oro. Nadie será lo suficientemente cobarde como para negar que has estremecido nuestro corazón para siempre.
Todo tu país aplaude tu medalla y tu sueño, que hoy es una realidad histórica para nuestra nación.
Las distancias. El divertido color de tus zapatos. Tu lenguaje en clave a través de las cámaras de televisión. La presión. Las faltas en la línea de salida. Nervios y oraciones. Las lágrimas de tu gente. El esfuerzo de una vida consagrada. Pasos medidos, estrategia, casi volar sobre la arena. Un pueblo necesitado del sabor de la victoria. 8.34 metros. La receta perfecta para la inmortalidad: la distancia en la que te has hecho leyenda y que hoy nos hace más orgullosos aún de haber nacido bajo este cielo.
Quizás nunca pensé vivir para ver un momento así. Son acaso segundos de emoción. Ahora sé que pronto, al otro lado del mundo el himno de mi patria pequeñita se escuchará y la bandera se elevará lentamente para que, luego de esos 8.34 metros, el nombre de Panamá reine sobre las naciones de la tierra.
Irving. Eres mil veces ganador porque no sólo has luchado contra tus contendores, sino también contra un sistema corrupto, federaciones deportivas formadas por hombres sin alma, de esos que aseguran primero su boleto a las Olimpiadas y después de que nuestros muchachos tengan uniformes, entrenamiento, canchas, equipo y credenciales. De esos que revenden boletos de cortesía. De esos que se ríen del pueblo todos los días. A pesar de todo esto, hoy has encendido la llama olímpica en el corazón de cada panameño. Y no nos alcanzan las palabras para darte las gracias. Porque necesitábamos lo que nos has regalado. Porque mereces la gloria que has alcanzado y demostrado que de cosas buenas también se hacen titulares.
Ningún panameño olvidará dónde estaba cuando cubriste a tu patria de oro. Nadie será lo suficientemente cobarde como para negar que has estremecido nuestro corazón para siempre.
Todo tu país aplaude tu medalla y tu sueño, que hoy es una realidad histórica para nuestra nación.
lunes, 11 de agosto de 2008
De Nazareth a Smallville
Intertextualidad entre la historia
de Jesús de Nazareth y la de Superman
Mediante un muy superficial análisis intentaremos comprobar que la historia de Kal-El de Kriptón, Superman, tiene muchas similitudes, por no decir que está basada, en la historia de Jesús de Nazareth, el Hijo de Dios según el Evangelio de la Iglesia Católica.
El héroe es un ser divino y humano adornado por poderes divinos y humanos, que lo ponen por encima de sus pares y por regla general al servicio del bien, o al menos para el de su gente. En términos literarios, la historia que cuenta el Evangelio nos habla de un ser humano nacido de mujer y al mismo tiempo hijo de Dios, lo cual podríamos entender como ajustable al arquetipo de heroicidad de la antigua Grecia.
Por otro lado Jerry Siegel y Joe Shuster, ambos judíos, inventaron el personaje del superhéroe Superman a finales de la década de los 30 del siglo pasado, un momento especialmente difícil y definitivo en la historia judía, durante el cual una nación entera se vio perseguida y acosada como fruto directo del fascismo alemán. Siegel y Shuster iniciaron la historia de Superman por medio de tiras cómicas que se publicaban en periódicos, y en revistas de distribución periódica. El libreto de la película Superman I (1978) fue elaborado por Mario Puzzo, autor de "El Padrino". Esta es la historia de un bebé que se salva del Apocalipsis de su planeta natal, Kriptón, en principio parece un préstamo tomado de la historia de Moisés –que literalmente significa "salvado de las aguas"—y cuya cuna espacial aterriza en la tierra, lugar en el que crece entre humanos con padres humanos adoptivos.
Según el Evangelio de San Mateo, Jesús niño cae dentro de una elipsis narrativa que se ha dado en llamar "los años ocultos de la vida de Jesús" sobre la cual la iglesia católica no proporciona mayores detalles, y aproximadamente hacia el año 30 de su nacimiento un Jesús adulto hace su aparición al ser bautizado por Juan el Bautista y en el Capítulo 4 del mismo Evangelio, se traslada al desierto, sin compañía en donde es tentado por el demonio luego de 40 días de ayuno. En adelante el Nazareno iniciará su vida de prédica y milagros entre los hombres. Entre estos milagros están control de los elementos, resurrección de muertos, sanación de enfermos, conversión de agua en vino, multiplicación de panes y caminar sobre el agua, por decir algunos.
La película original de Superman, nos retrata a un hombre, sin hacer especial énfasis en su niñez y adolescencia.
La historia de Superman lleva al superhéroe a la fortaleza de la Soledad a descifrar los mensajes de su padre y lleva una vida pública por medio de la cual hace despliegue de súper poderes entre los cuales tenemos capacidad de volar, rapidez sobrehumana, alteración del tiempo—aunada a resurrección de muertos—y vida ejemplar dedicada a la erradicación del mal en todas sus manifestaciones.
Es interesante considerar el contenido fuertemente vinculante de los parlamentos de Jor-El, padre de Superman, en la más reciente entrega de la saga de Superman, "Superman Returns", tomada textualmente de las anteriores: la cual reconcilia aun más la tradición cristiana con la trama del filme. El padre reconoce haber mandado a su hijo único a nuestro planeta, padre e hijo se identifican como una sola entidad—el hijo se convierte en el padre y el padre se convierte en el hijo-- y aun una escena de humillación y golpiza del super héroe a manos del siempre villano Lex Luthor—de nuevo el hecho de que el nombre del villano en la historia comience con la L de Lucifer parece ser coincidental—parece hacer una referencia al Vía Crucis del Nazareno.
La nueva película, incluye varias escenas que Superman aparece de pie, flotando en el aire, con los brazos abiertos en forma de cruz, como nunca antes, evocadora de la crucifixión.
El nombre kriptoniano de Superman es Kal-El, y la familia terrestre que lo adopta luego de su aterrizaje—los Kent—le nombran Clark. De esta manera el nombre terrestre del niño kriptoniano Clark Kent, tiene algún grado de rima con el nombre kriptoniano. Los padres terrestres de Kal-El se llaman Johnathan (¿A caso evocando el nombre de José?) y Martha (Probablemente utilizando la inicial de María.) La intertextualidad de ambas historias se hace más patente a medida que nos adentramos en sus detalles.
Sea cual fuere la idea original o el propósito inicial de los creadores del personaje de Superman, la influencia de la tradición cristiana es un componente presente en toda la trama y no creemos que sea producto del azar. Las consideraciones sociológicas de la razón por la cual los creativos judíos eligieran precisamente al causante del importante cisma entre judíos y cristianos como una herramienta—en caso de que esa fuera la intención—para resaltar valores, es materia de un estudio totalmente diferente. Cabe resaltar también en este punto que el giro de los creadores de la tira cómica y el de los realizadores de las películas y su respectiva evolución son también tema para otro estudio. Nuestras conclusiones de hoy están basadas con la idea de Superman que manejamos en el año 2006.
Hay múltiples semejanzas entre la historia de uno de los seres humanos más controversiales de todas las épocas: Jesús de Nazareth, al cuál contraponemos en este trabajo con uno de los íconos
del arquetipo del superhéroe por excelencia: Superman. De estos detalles podemos inferir, a nivel literario, que el caso de Jesús de Nazareth y Superman, es un caso de mitología comparativa, por medio del cual se realzan las características positivas de los arquetipos heroicos.
Intertextualidad entre la historia
de Jesús de Nazareth y la de Superman
Mediante un muy superficial análisis intentaremos comprobar que la historia de Kal-El de Kriptón, Superman, tiene muchas similitudes, por no decir que está basada, en la historia de Jesús de Nazareth, el Hijo de Dios según el Evangelio de la Iglesia Católica.
El héroe es un ser divino y humano adornado por poderes divinos y humanos, que lo ponen por encima de sus pares y por regla general al servicio del bien, o al menos para el de su gente. En términos literarios, la historia que cuenta el Evangelio nos habla de un ser humano nacido de mujer y al mismo tiempo hijo de Dios, lo cual podríamos entender como ajustable al arquetipo de heroicidad de la antigua Grecia.
Por otro lado Jerry Siegel y Joe Shuster, ambos judíos, inventaron el personaje del superhéroe Superman a finales de la década de los 30 del siglo pasado, un momento especialmente difícil y definitivo en la historia judía, durante el cual una nación entera se vio perseguida y acosada como fruto directo del fascismo alemán. Siegel y Shuster iniciaron la historia de Superman por medio de tiras cómicas que se publicaban en periódicos, y en revistas de distribución periódica. El libreto de la película Superman I (1978) fue elaborado por Mario Puzzo, autor de "El Padrino". Esta es la historia de un bebé que se salva del Apocalipsis de su planeta natal, Kriptón, en principio parece un préstamo tomado de la historia de Moisés –que literalmente significa "salvado de las aguas"—y cuya cuna espacial aterriza en la tierra, lugar en el que crece entre humanos con padres humanos adoptivos.
Según el Evangelio de San Mateo, Jesús niño cae dentro de una elipsis narrativa que se ha dado en llamar "los años ocultos de la vida de Jesús" sobre la cual la iglesia católica no proporciona mayores detalles, y aproximadamente hacia el año 30 de su nacimiento un Jesús adulto hace su aparición al ser bautizado por Juan el Bautista y en el Capítulo 4 del mismo Evangelio, se traslada al desierto, sin compañía en donde es tentado por el demonio luego de 40 días de ayuno. En adelante el Nazareno iniciará su vida de prédica y milagros entre los hombres. Entre estos milagros están control de los elementos, resurrección de muertos, sanación de enfermos, conversión de agua en vino, multiplicación de panes y caminar sobre el agua, por decir algunos.
La película original de Superman, nos retrata a un hombre, sin hacer especial énfasis en su niñez y adolescencia.
La historia de Superman lleva al superhéroe a la fortaleza de la Soledad a descifrar los mensajes de su padre y lleva una vida pública por medio de la cual hace despliegue de súper poderes entre los cuales tenemos capacidad de volar, rapidez sobrehumana, alteración del tiempo—aunada a resurrección de muertos—y vida ejemplar dedicada a la erradicación del mal en todas sus manifestaciones.
Es interesante considerar el contenido fuertemente vinculante de los parlamentos de Jor-El, padre de Superman, en la más reciente entrega de la saga de Superman, "Superman Returns", tomada textualmente de las anteriores: la cual reconcilia aun más la tradición cristiana con la trama del filme. El padre reconoce haber mandado a su hijo único a nuestro planeta, padre e hijo se identifican como una sola entidad—el hijo se convierte en el padre y el padre se convierte en el hijo-- y aun una escena de humillación y golpiza del super héroe a manos del siempre villano Lex Luthor—de nuevo el hecho de que el nombre del villano en la historia comience con la L de Lucifer parece ser coincidental—parece hacer una referencia al Vía Crucis del Nazareno.
La nueva película, incluye varias escenas que Superman aparece de pie, flotando en el aire, con los brazos abiertos en forma de cruz, como nunca antes, evocadora de la crucifixión.
El nombre kriptoniano de Superman es Kal-El, y la familia terrestre que lo adopta luego de su aterrizaje—los Kent—le nombran Clark. De esta manera el nombre terrestre del niño kriptoniano Clark Kent, tiene algún grado de rima con el nombre kriptoniano. Los padres terrestres de Kal-El se llaman Johnathan (¿A caso evocando el nombre de José?) y Martha (Probablemente utilizando la inicial de María.) La intertextualidad de ambas historias se hace más patente a medida que nos adentramos en sus detalles.
Sea cual fuere la idea original o el propósito inicial de los creadores del personaje de Superman, la influencia de la tradición cristiana es un componente presente en toda la trama y no creemos que sea producto del azar. Las consideraciones sociológicas de la razón por la cual los creativos judíos eligieran precisamente al causante del importante cisma entre judíos y cristianos como una herramienta—en caso de que esa fuera la intención—para resaltar valores, es materia de un estudio totalmente diferente. Cabe resaltar también en este punto que el giro de los creadores de la tira cómica y el de los realizadores de las películas y su respectiva evolución son también tema para otro estudio. Nuestras conclusiones de hoy están basadas con la idea de Superman que manejamos en el año 2006.
Hay múltiples semejanzas entre la historia de uno de los seres humanos más controversiales de todas las épocas: Jesús de Nazareth, al cuál contraponemos en este trabajo con uno de los íconos
del arquetipo del superhéroe por excelencia: Superman. De estos detalles podemos inferir, a nivel literario, que el caso de Jesús de Nazareth y Superman, es un caso de mitología comparativa, por medio del cual se realzan las características positivas de los arquetipos heroicos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
RAMÓN FRANCO: REINVENTANDO EL NEGOCIO MARÍTIMO
Por: Klenya Morales de Bárcenas (@klenyamorales) Especial para la Revista Viento y Marea de la Autoridad Marítima de Panamá Ramón Franco n...
-
No admito que se pueda destruir la unión fiel de dos almas. No es amor el amor que no logra subsistir o se amengua al herirle el desamor. El...
-
Por: @KlenyaMorales Hasta hace un par de años fue que vine a escuchar sobre esta “condición mental”. E inmediatamente supe que yo la padezc...
-
Por: @ KlenyaMorales Ama de casa, escritora, abogada y traductora. Aprovecharé esta época postelectoral para contarles por qué pago mis...