AY AMOR , que despierta a las piedras, Ay de aquel que no te sienta alrededor. Ay amor, que nos abres las puertas, Ay amor, tan necesario como el Sol. Cuando llamas estoy, A la hora que tú digas voy... Tantas veces nos quitas la pena, Como tantas es amargo tu sabor. Ay amor, del jardín yerbabuena, Como espina puede ser el desamor. Cuando llamas estoy, A la hora que tú digas voy... Ay amor, que despierta a las piedras, Ay amor, que derriba fronteras... Si fueras posible de amarrar, Tenerte siempre cerca, Poderte controlar. Saber cada paso que das, Si sales o si entras, si vienes o si vas, Tus narices a enseñar... ¡ Ay amor, como inmenso es el mar...! Es amor, quien altera las venas, Como inventa las mareas o la flor. Ay amor, que nos tienes en vela, Y a quien duerme se le para hasta el reloj. Cuando llamas estoy, A la hora que tú digas voy... Ay amor, como polvo de estrellas, Ay amor, que derriba fronteras... Si fueras posible de amarrar, Tenerte siempre cerca, Poderte controlar, Saber cada paso que das, Si sales o si entras, si vienes o si vas, Tus narices a enseñar... ¡ Ay amor, como inmenso es el mar...! Ay amor, que derriba fronteras, Ay amor, que despierta a las piedras.
Víctor Manuel
martes, 15 de julio de 2008
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2 comentarios:
Aires lorquianos que recuerdan aquel: Ay amor que se fue por el aire/Ay amor que se fue y no vino.
Me ha gustado leerlo, como tus entradas en verso y en prosa.
Saludos...
La verdad es que para mí esa es una canción eterna. Sin tiempo...
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